Esta es unas de las preguntas que más nos hacen amigos, conocidos y potenciales clientes. La respuesta siempre es un «depende»… El precio de una web depende de lo que necesite el cliente, del trabajo que conlleve, si hay que recurrir a elementos de pago como plugins o plantillas, el nivel de optimización que requiera, y diversos aspectos más. Vamos a suponer un caso típico, y vamos a dar cifras concretas.
Una web institucional típica
Pongamos el caso de una web para una pequeña empresa o negocio, disponible sólo en español, con secciones habituales de quienes somos, productos o servicios, localización, datos y formulario de contacto, quizás una sección de blog, portfolio de clientes o trabajos realizados, los textos legales habituales (aviso legal, política de privacidad, política de cookies)…
En la portada podría ir un carrusel de fotos o de llamada a la acción, un resumen de los principales servicios o productos, últimos trabajos, reseñas u opiniones de clientes…
En cuanto al diseño, por supuesto deberá ser fluido y adaptable a móviles, tablets y ordenadores. Vamos a suponer un mínimo de optimización (WPO), usando cachés, compresión Gzip a nivel de servidor, minificación de ficheros CSS y JS, uso de imágenes en formato Webp…
Como gestor de contenidos se usará WordPress, el más extendido.
Ahora que hemos definido un caso típico al que se ajusta la mayoría de los sitios web para pequeños negocios y autónomos… ¿Cuánto costaría una web así?
Estimando el precio de nuestra web
Dado el caso típico definido anteriormente vamos a calcular el coste final de un sitio web así.
Hay dos principales partidas que calcular, el trabajo (número de horas) que conlleva su diseño, maquetación de contenidos, desarrollo de funcionalidades y puesta en marcha; y por otro el coste de todos los elementos que se necesitan, principalmente serán plugins y plantillas de pago, dominio y alojamiento web.
Todos los precios y costes que se indicarán a continuación son sin impuestos (IVA o equivalente).
Coste del desarrollo
Una web así podría llevarle a un diseñador o desarrollador web unos 4 días de trabajo (supongamos 30 horas en total), entre reuniones (ya sea presencial, virtual, intercambio de correos), elección de plantilla, personalización, maquetación de contenidos, etc.
Suponiendo que el trabajo lo realizará un autónomo o freelance, y que difícilmente encontraremos a alguien dispuesto a hacerlo por menos de 20€ la hora, tenemos un coste mínimo estimado de 600€ (20€ x 30 horas).
Aunque lo habitual, si contamos con profesional con cierta experiencia, es que su tarifa ronde los 25-30 €/hora y el coste del desarrollo en sí se sitúe en los 750€ – 900€.
Este precio podría incrementarse en caso de contratar a una agencia o empresa, cuyos costes son mayores y el precio hora suele superar los 30€.
Coste de componentes y servicios adicionales
El precio en este punto varía bastante según la plantilla usada y el alojamiento web escogido, y en si recurriremos o no algún plugin de pago, o si queremos contar con servicio de soporte y mantenimiento.
Sobre el alojamiento, recomendamos contratar un buen servicio optimizado para WordPress, cuyos precios podrían estar sobre los 5€ mensuales, y huir de los planes extremadamente baratos de 2€ al mes o similar.
Podemos considerar el siguiente resumen de gastos:
| Concepto | Gasto anual |
| Alojamiento | 72 – 120€ |
| Dominio (.es, .com) | 8€ |
| Plantilla | 0 – 60€ |
| Plugins | 0 – 60€ |
| Soporte y mantenimiento (1 hora mensual) | 280 – 380€ |
En el caso más sencillo tendríamos un gasto anual de unos 80€ anuales en concepto de alojamiento y dominio.
En caso de necesitar de plantilla y algún plugin de pago, el coste podría rondar los 200€ anuales, considerando siempre que estamos ante el caso típico de una web corporativa o institucional como describimos anteriormente.
Es recomendable contratar servicios de mantenimiento. La web recién entregada seguramente irá fenomenal al principio, pero con el tiempo se hace necesario realizar ajustes, actualizar software, cambiar contenidos, etc. Una bolsa de 12 horas anuales (1h mensual) de mantenimiento podría oscilar entre los 280-380€.
Recapitulando el coste total
Recordar que todos los precios indicados son sin impuestos incluidos, y habría que sumarlos a las cantidades indicadas. Si se contratan a empresas o profesionales reconocidos de cierto prestigio, el coste bien podría duplicarse perfectamente.
El caso más barato posible para una web corporativa sencilla como la descrita, en la que no haya gastos en plugins ni plantillas, ni contratemos servicio de mantenimiento, encontremos un diseñador/desarrollador muy barato, y contratemos directamente un servicio de alojamiento asequible, el coste mínimo total estaría sobre los 680€.
Contando con un precio por del desarrollo más acorde a la realidad del mercado, contando con plantilla y algún plugin de pago, y contratando servicio de mantenimiento, el coste total de la web durante el primer año podría ser perfectamente de 1.300-1.450€ (750 – 900€ de desarrollo, 200€ anuales en alojamiento, dominio y elementos de pago, y 350€ de mantenimiento).
En los años sucesivos, contabilizando el servicio de mantenimiento de 1 hora mensual (altamente recomendable), alojamiento, dominio y algún posible gasto en plugins o plantillas, el coste anual rondaría los 500€.
Es conveniente volver a dejar claro que estos precios son para una web corporativa como la descrita al principio del artículo, pensada para un autónomo o pequeño negocio. Hay proyectos más complicados que requieran de más horas de trabajo, necesiten de horas de mantenimiento adicionales o de servidores más potentes, lo cual encarecerá el coste.
Alternativa más económica
Muchos comercios o autónomos no pueden permitirse, o no están dispuestos, pagar cantidades superiores a los 1.000€ el primer año, y anualidades sucesivas que rondan los 500€, más impuestos.
Pensando en estos casos te ofrecemos una tarifa única, con la que podrás tener la web de tu negocio desde 468€ anuales (impuestos incluidos o exentos). Podrás configurar lo que necesitas y pagar justo por ello, sin costes ocultos.